La industria automotriz en México se posiciona como un pilar económico, siendo el cuarto productor mundial de autopartes y el séptimo de vehículos ligeros. Con más de 2,000 empresas involucradas y presencia en 24 estados, nuestra capacidad de producción es impresionante; sin embargo, con estas oportunidades vienen desafíos significativos en la protección de activos, especialmente en un entorno donde el robo y la seguridad son preocupaciones constantes.
¿Cómo se estructura la Cadena de Valor automotriz?
La cadena de valor automotriz se organiza en distintos niveles, con los proveedores TIER desempeñando roles cruciales:
- Proveedores Tier 1: Mantienen relaciones directas con los OEM, suministrando componentes esenciales como motores y sistemas de frenos. En México, aproximadamente 600 empresas están catalogadas en este nivel.
- Proveedores Tier 2: Abastecen a los Tier 1 con componentes específicos como sistemas eléctricos e interiores de vehículos. Alrededor de 1,200 empresas mexicanas operan en este segmento.
- Proveedores Tier 3: Proveen materias primas y componentes básicos a los Tier 2, incluyendo piezas metálicas y servicios logísticos.
Por su parte, los OEM o fabricantes de equipos originales (por sus siglas en inglés Original Equipment Manufacturer) son empresas responsables del diseño, fabricación y ensamblaje de vehículos y sus componentes originales para la construcción completa de automóviles.
Desafíos en la Protección de Activos
Enfrentamos desafíos significativos que afectan la seguridad y la eficiencia operativa en la industria:
- Robo en Ruta: Un incremento alarmante del 24% en robos en comparación con el año anterior, con pérdidas significativas que afectan la disponibilidad de refacciones y aumentan los costos operativos y de seguros.
- Centros de Distribución: Vulnerabilidades como robos, fraude interno y falta de apego a procesos comprometen la seguridad y la integridad de la cadena de suministro.
- Impacto Económico: Se reportaron pérdidas por más de 3,000 millones de pesos debido al robo de autopartes en 2022, afectando directamente el rendimiento financiero y la competitividad del sector.
Soluciones Estratégicas: La Importancia de ALTO
Para contrarrestar estos desafíos y proteger sus activos, es crucial implementar estrategias robustas de seguridad:
- Incremento del ROI: Facilitamos la recuperación efectiva de autopartes robadas. Este impacto directo en el retorno sobre la inversión (ROI) evidencia el ahorro significativo y la eficiencia económica que se puede lograr.
- Optimización de la Cadena de Valor: Garantizamos que la cadena de suministro opere sin interrupciones. Nuestra labor asegura que los flujos de producción y distribución se mantengan estables, minimizando los tiempos de inactividad y las pérdidas asociadas.
- Due Diligence: Alineamos los objetivos corporativos de los clientes, permitiendo a las empresas cumplir con los estándares de cumplimiento y fortaleciendo la confianza en las operaciones.
- Apoyo Legal Especializado: Aunque muchas empresas automotrices cuentan con equipos legales sólidos, a menudo carecen de especialización en problemáticas penales. ALTO llena este vacío, ofreciendo servicios legales específicos y asesoría experta para manejar casos de robo y fraude con mayor eficacia.
En resumen, la industria automotriz mexicana enfrenta desafíos sustanciales en la protección de activos, pero con una combinación adecuada de tecnología avanzada, prácticas de seguridad robustas y colaboración con proveedores especializados como ALTO, podemos mitigar riesgos y fortalecer la resiliencia de toda la cadena de valor.